Hola, ya estoy aquí de nuevo. Hoy quiero hablarles de la Navidad que, aunque parezca mentira, ya está cerca. Esta entrañable celebración que, aunque de origen religioso, no podemos dejar de asociarla a las fiestas, los regalos y la decoración navideña ( si te gustan todas estas cosas te invito a que visites la tienda).
A pesar de que este año las cosas estén un poco revueltas, siento que debemos permitir, más que nunca, que el optimismo, la esperanza, la generosidad y la paz reinen en todos nosotros para hacernos sentir mejor, más cercanos y por qué no, para permitirnos recuperar esa alegría infantil, esa ilusión que a veces perdemos durante el año. Más allá de que este año podamos, o no, reunirnos con nuestros familiares y amigos, creo que debemos aprovechar este momento para renovar nuestras emociones y sentimientos.
Navidad significa nacimiento y esto nos invita a reflexionar sobre cómo podemos mejorar como personas, como dejar que nazcan, dentro nuestro, sentimientos de paz y esperanza. Agradecer por todo lo que tenemos y pedir por todo lo que nos hace tanta falta, siempre con amor y fe.
Disfrutemos de las cosas simples de la vida, una mantita cálida que nos abriga, un chocolate caliente y el olor de las galletas horneándose en la cocina. Respiremos bien profundo y confiemos en que estos duros momento que hoy estamos atravesando pasarán, como pasa todo en la vida y no dejemos de ser felices.
Desde lo más profundo de mi corazón les deseo una FELIZ NAVIDAD.